quinta-feira, 21 de outubro de 2010

un modelo deportivo que propone el desarrollo personal a través del deporte

Escuela Deportiva ITESO

Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente
tomas@iteso.mx Tomás Trujillo Santana
(México)


Dentro de la cultura de la sociedad moderna el concepto de deporte es utilizado como una bandera positivista en diversos campos, así decimos que los jóvenes deberían orientarse al deporte en lugar de los vicios, así gobiernos y comunidades religiosas han apostado por el deporte como una actividad positiva para quien lo practica. Sin embargo, lejos de este obsoleto esquema, el deporte en la actualidad esta matizado de conductas personalistas y de una orientación marcada hacia el logro. En este sentido, ¿cuales esquemas propone la sociedad actual para asegurar que el deporte sea un contexto positivo?. Como una alternativa a este cuestionamiento surge la propuesta de crear la escuela deportiva ITESO cuyo objetivo es favorecer el desarrollo personal a través del deporte. Para cumplir este objetivo se han diseñado programas deportivos en fútbol, básquetbol y voleibol los cuales se combinan con programas basados en metodologías psicológicas. Los programas de trabajo psicológico varían sus objetivos según la categoría del participante ya que van a la par de su desarrollo psicológico. Dada la importancia de rescatar toda la información posible sobre esta aproximación al modelo que se desea crear, los programas tienen metodologías precisas de evaluación entre las que se encuentran observaciones diarias por parte de los entrenadores y baterías psicológicas. La Escuela deportiva ITESO representa la aproximación a un estilo de trabajo que permitirá asegurar que el deporte puede apuntar hacia una dirección más allá del mero desarrollo físico.

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 5 - N° 26 - Octubre de 2000
Trabajo presentado en el IIIº Encuentro Deporte y Ciencias Sociales y
1as Jornadas Interdisciplinarias sobre Deporte. UBA - 13 al 15 de Octubre 2000


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Introducción

Durante mucho tiempo el deporte ha despertado un gran interés no solo por parte de sus practicantes y aficionados sino también por parte de diferentes ciencias que a través de los años han logrado encontrar dentro de los contextos deportivos variados objetos de estudio.

Es así, como el deporte es analizado cada vez con mayores elementos científicos, lo que permite tomar en cuenta no sólo aquellos elementos ejecutivos de las actividades deportivas, sino también aquellos elementos que antes se imaginaron intangibles y con poca importancia para el desarrollo de las actividades deportivas.

Actualmente el deporte es una de las actividades más populares del mundo, lo que provoca que desde temprana edad el ser humano sea motivado a su práctica.

Por este motivo en la sociedad actual existe una necesidad por la capacitación deportiva desde los primeros años de vida. Es así, como en el intento por satisfacer esta necesidad han surgido a través de los años numerosas escuelas deportivas infantiles, sin embargo estas ofrecen programas poco elaborados y sin un seguimiento en el desarrollo de los participantes, a lo que se suma aquellas escuelas que responden sólo a intereses económicos siendo esta una de las principales características del deporte en la actualidad, de tal forma que los niños se ven privados de participar en un contexto que puede favorecer su desarrollo más allá del aspecto físico.

Existe pues, una paradoja entre el uso de la actividad física - deportiva como una herramienta de formación del carácter y el uso actual del deporte como una herramienta comercial que permite el desarrollo económico de grandes empresas (Lawther, 1978).

Es así, como el departamento de Educación Física y Salud Integral del ITESO (Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente) consciente de las necesidades sociales del presente y basado en los fundamentos y objetivos de la Universidad, propone la creación de una escuela deportiva infantil que devuelva al deporte la posibilidad de utilizarlo como una herramienta formativa y educativa.

De esta forma a través de un equipo de trabajo compuesto por entrenadores deportivos, administradores y un psicólogo del deporte se ha consolidado esta propuesta.

El modelo de trabajo sé compone de programas deportivos de Fútbol, Voleibol y Básquetbol, combinados con programas basados en teorías y técnicas psicológicas, consolidando así un modelo que persigue facilitar el desarrollo personal de los niños y adolescentes a través del deporte.


Revisión de literatura

A continuación se revisa el concepto de juego, tratando de entender como en su evolución se convirtió en deporte y como este una vez ya constituido, empezó a representar un contexto benéfico para sus practicantes.

Juego y deporte: diferenciación y perspectivas sociales.

Actualmente es superfluo señalar el papel capital del juego en el desarrollo del niño y hasta del adulto. "El hombre no está completo sino cuando juega", escribió Schiller (en Chateau, 1958), y la fórmula ha sido comentada frecuentemente. Arte, ciencia y hasta religión son a menudo juegos serios. Se juega a pintar o a rimar como se juega al ajedrez; y no pocas obras que han encantado a generaciones no fueron para sus autores más espléndidos juegos (Chateau, 1958).

Parent (1990), señala que el juego es necesario como el sueño, es una liberación de la energía excedente, hasta puede ser una práctica que ayude a la auto preservación, el hombre juega y ésta es su ética, logra un equilibrio entre lo real y lo imaginario. Tiende a la conciliación interior, sin conflicto, en donde entran como datos de referencia la aspiración, la convicción y la responsabilidad.

Según Chateau (1958), "La infancia sirve para jugar y para imitar". No se puede imaginar la infancia sin sus risas y sus juegos.

Estudiar en el niño solo el crecimiento, el desarrollo de las funciones, sin tener en cuenta el juego, sería descuidar ese impulso irresistible por el cual el niño modela él mismo su propia estatua. No se debería decir de un niño solamente que "crece", habría que decir que se "desarrolla por el juego".

La infancia tiene por consiguiente como fin el adiestramiento por el juego de las funciones tanto fisiológicas como psíquicas. El juego es así el centro de la infancia, y no se le puede analizar sin señalarle un papel de preejecicio.

Juego y deporte tienen en común la representación de un acto dentro de un campo propio delimitado para una fiesta. En ambos hay alegría. El elemento libertad está claramente manifiesto en el juego, no así en el deporte. El conjunto de los actos deportivos se da durante una temporada; los juegos cuando eran sagrados se veían ilimitados en el tiempo. El juego sin embargo, tiene características culturales que le son peculiares e importantes y que no aparecen en el deporte. En el juego nace la civilización, es el principio de la sociedad porque en él se descubren los valores ajenos: el honor o la valentía y del conjunto: la disciplina y la personalidad, no así en el deporte porque perdió su carácter de juego precisamente.


Deporte: evolución y contexto social

Cagigal (1985; Castejón, 1995), opina sobre el deporte, "Nosotros no entendemos deporte como un concepto que comprenda toda la enseñanza del movimiento, ni siquiera lo referido solamente a la competición organizada. Deporte es aquella competición organizada que va desde el gran espectáculo hasta la competición de nivel modesto; también es cada tipo de actividad física realizada con el deseo de compararse, de superar a otros o a sí mismo, o realizada en general con aspectos de expresión, lúdicos, gratificantes, a pesar del esfuerzo.

Castejón (1995), define al deporte como una actividad física lúdica, donde la persona, de forma individual o en cooperación con otros, puede competir consigo mismo, con el medio o contra otros tratando de superar sus propios límites (tiempo, distancia, habilidad, etc.), respetando las normas establecidas y logrando valerse de algún material para practicarlo.

Etimológicamente la palabra deporte deriva del latín disporte (dis y portare) que quiere decir sustraerse al trabajo. Esta derivación implica que el deporte es diversión, no tarea pesada. En el deporte la actitud es de juego y la satisfacción reside no tanto en los resultados como en la experiencia misma, sin embargo los resultados placenteros aumentan casi siempre el deleite de participar (Lawther,1978).

El deporte y el juego han formado y siguen formando parte de una cultura universal que los convierten en instrumentos básicos y esenciales de la vida social (Snyder y Spreitzer, 1975; en Ramírez y Rodríguez, 1996).

Resulta difícil encontrar una cultura o una civilización por más milenaria que ésta sea que no haya tenido dentro de su forma de vida la práctica de alguna actividad deportiva que reflejara una parte muy importante de la esencia de sus pueblos.

En la Grecia clásica las actividades deportivas además de ser un entrenamiento militar y una especie de ofrenda de tinte religioso, se transformaron en una competencia donde el culto a la belleza y el perfeccionamiento del cuerpo fueron sustituyendo su significado inicial. El fenómeno espectáculo empezó a adquirir una relevancia significativa, de tal manera que se crearon varias competencias organizadas bajo un reglamento y una periodicidad previamente establecida. Las competencias más importantes eran 4: Juegos Olímpicos (cada 4 años), Juegos Píticos en la ciudad de Delfos (cada 4 años), Juegos Itsmicos y Juegos Nemeos (cada 2 años) (Bowra, 1965; en Ramírez y Rodríguez, 1996).

Fue principalmente en el año de 1888 cuando el deporte nace en su forma moderna y se convierte en un espectáculo masivo, cuando el Barón de Coubertín, reúne a los representantes de 14 naciones en un "Congreso para el establecimiento de los Juegos Olímpicos", que desde entonces se siguen celebrando cada 4 años en diferentes ciudades del mundo (Parent, 1990).


La influencia del deporte en el desarrollo personal

La posibilidad educativa de los deportes ha sido una de las razones más comunes que se han propuesto en el intento de justificarlos. Las escuelas y universidades de muchas sectas y órdenes religiosas han mantenido la actividad deportiva con vistas a la formación del carácter, al desarrollo de la autodisciplina y a la tolerancia del dolor, de la incomodidad y del peligro. Los puritanos eran, en la práctica, unos ascetas aún en el campo de juego.

Los objetivos propuestos que con más frecuencia se invocan como razones para la inclusión de los deportes en la enseñanza pública y privada son la formación del carácter, el mantenimiento de la salud y de la aptitud, en especial aptitud para el servicio militar y quizás el crecimiento y desarrollo temprano de los jóvenes.

Los filósofos de la educación y los gobernantes abogaron, a lo largo de los siglos, para que se incluyeran los juegos y deportes en la educación de los niños. Sócrates, Aristóteles, Quintiliano, Comenius, John Locke y también John Dewey pensaban que los juegos físicos eran esenciales para la educación.

Otras metas para cuya consecución se considera el deporte como el instrumento adecuado son la integración y la solidaridad grupal, la comunicación intergrupal e intragrupal, el contacto social y el conocimiento entre ambos sexos, la expresión de formas estéticas con gracia y belleza, un medio de perseverar la concordia en una sociedad en la que el hombre cuenta con cantidades crecientes de pasatiempos, un escape inofensivo para la agresión, un sustituto para los vicios e impulsos oprobiosos de la gente común, desde el punto de vista social, y como fuente de prestigio nacional e internacional. La sociedad espera que los deportes produzcan resultados visibles y tangibles que sirvan como testimonios de que ha conquistado vigor y mejoramiento físico. La sociedad, necesita tener campeones que de manera espectacular encarnen la superioridad física.

Coincidiendo con Lee (1990; en Gutiérrez, 1995), y basados en el convencimiento general de que cualquier actividad que se realice durante los años de formación de un individuo producirá un impacto educacional, como ya señala Escámez (1986; en Gutiérrez, 1995), el deporte es una de las influencias a considerar en la educación de la juventud y , para muchos, la más importante aparte del colegio. Por ello, resulta de capital importancia que todos los responsables de la organización y desarrollo de los programas deportivos comprendan los efectos que las experiencias deportivas pueden ocasionar (Gutiérrez, 1995).

Este marco de referencia permite ubicar de donde se fundamenta la propuesta de la Escuela Deportiva ITESO, conscientes del papel capital del juego en la infancia y de los efectos de la participación en actividades deportivas; se propone sobre estas bases conjugar elementos que permitan tener un mayor control en los resultados que de la participación deportiva se esperan.


Escuela Deportiva ITESO

Objetivo

El objetivo de las Escuela Deportiva ITESO es utilizar el deporte como una herramienta de tipo formativo, donde el niño y el adolescente encuentren un espacio a la diversión, al desarrollo físico, al desarrollo técnico - táctico deportivo, al autoconocimiento, a la confrontación con su medio y al convivió social; que les permita lograr un desarrollo personal óptimo y así favorecer el equilibrio social.

Metodología

La Escuela Deportiva ITESO ofrece 3 deportes, Fútbol Soccer, Básquetbol y Voleibol. Existen 4 categorías que van desde los 6 años a los 14 años.

Cada categoría tiene un programa de entrenamiento deportivo específico diseñado por un entrenador experto en cada deporte, el cual se combina con un programa de actividades con orientación psicológica que persiguen diferentes objetivos según la edad del niño. Estos programas se combinan a partir de la categoría de 9 -10 años, a continuación se describen los objetivos de las actividades con orientación psicológica en cada categoría.

CATEGORÍA
PROGRAMA
OBJETIVO

9 - 10 Años
Valores
Representar un espacio propicio para que el participante experimente, confronte y tome conciencia de su propio desarrollo valoral.

11-12 Años
Desarrollo de Variables de Personalidad
Hacer conscientes las habilidades de asertividad, autoestima, tolerancia, motivación de logro y socialización para facilitar el desarrollo personal a través del deporte.

13-14 Años
Autoconocimiento
Proporcionar al participante un espacio donde la reflexión, el auto análisis, la puesta en común, la experiencia deportiva y la convivencia con el grupo, faciliten el proceso de autoconocimiento.




Los niños asisten a la escuela deportiva 3 veces por semana y en ocasiones una 4 sesión cuando tienen encuentros deportivos. Dos de los 3 entrenamientos están destinados al desarrollar las habilidades y capacidades perseguidas por los programas deportivos y se dedica una sesión de la semana al trabajo de las actividades con orientación psicológica que generalmente se trabaja en un salón de clases. Una labor indispensable de los entrenadores es la de crear una dinámica grupal que permita asimilar las experiencias de forma integral es decir, que el participante identifiqué tanto el trabajo de cancha como el de los salones de clase como una misma experiencia.

Para garantizar que las actividades que se realizan impacten directamente en el desarrollo personal que se persigue se tienen diseños de evaluaciones muy precisos que van desde evaluaciones psicométricas (al inicio y al final de los programas), observaciones constantes, aplicación de instrumentos de evaluación a niños y padres de familia, hasta gráficas del desempeño esperado por parte de los entrenadores.


Conclusiones

La propuesta de la Escuela Deportiva ITESO es relativamente joven, sin embargo gracias a las metodologías precisas para recabar información del desarrollo de las mismas hemos ido perfeccionando la propuesta.

El equipo de trabajo de la Escuela Deportiva ITESO esta convencido de que esta propuesta cada vez se aproxima más a un modelo de trabajo que pudiera facilitar el que la experiencia deportiva de niños y jóvenes realmente se constituya como un contexto positivo para el desarrollo personal.

Sabemos que a lo largo del mundo existen trabajos sobresalientes en el terreno deportivo infantil, donde el simple ejercicio físico, táctico y técnico despiertan en los participantes elementos que influyen de forma positiva en su desarrollo, sin embargo con esta propuesta queremos de alguna forma incrementar la posibilidad de que estos efectos se controlen y no que queden al azar.

Como señalamos anteriormente, la Escuela Deportiva ITESO es una aproximación a un modelo de trabajo que pretende desarrollar el interés de dirigentes, entrenadores, psicólogos y personal involucrado en el deporte infantil por intentar configurar de distinta manera los contextos deportivos infantiles.


Bibliografía

Castejón, J.F. (1995). Fundamentos de iniciación deportiva y actividades físicas organizadas. Madrid: Dykinson.

Chateau, J. (1958). Psicología de los juegos infantiles. Buenos Aires : Ed. Kapelusz S.A.

Gutiérrez, M. (1995). Valores Sociales y Deporte. La actividad física y el Deporte como transmisores de valores sociales y personales. España: Ed. Gymnos.

Huerta, H., Dellamary G. (1986). Tiempo y espacio. El fútbol como fenómeno psicosocial del siglo XX. México, D.F.: Imprejal.

Lawther, J. (1972). Psicología del Deporte y del Deportista. España: Ed. Paidos Ibérica

Parent, J. (1990). Para una ética del deporte. Zamora, Michoacán: El colegio de Michoacán.

Ramírez, C.P., Rodríguez, M.M. (1996). Principales fuentes de estrés y sus repercusiones en el rendimiento de jugadores de fútbol de la primera división nacional. Tesis inédita de licenciatura en Psicología. Guadalajara, Jal.: ITESO.

Hacen falta competiciones más formativas en el deporte base

Centro de estudios, desarrollo e investigación
del fútbol español - CEDIF Horst Wein
(Alemania)


En el año olímpico 1992 Neil Postman, catedrático de sociología de la Universidad de New York, afirmó en su celebre libro "La desaparición de la infancia" (artículo en el periódico La Vanguardia en diciembre de 1993) que la sociedad moderna no diferencia los gustos del niño de los de los adultos: "Comen la misma comida, ven diariamente los mismos programas de televisión, cometen los mismos crímenes, toman alcohol y la droga, etc., etc.

También el mundo laboral se está alternando. Niñas de doce o trece años están entre Los modelos mejor pagados y hay niños actores y cantantes que a los 8 años son multimillonarios. Es imposible que estas personas se comportan como un niño debe comportarse…

Vivimos en una época en la cual lo sociedad moderna no distingue claramente entre el mundo del niño y el del adulto, y esto, según Postman, es muy peligroso. Dice "el niño debe descubrir los misterios de la vida adulta muy lentamente y de un modo psicológicamente aceptable. Si descubre demasiado pronto que sus padres no son perfectos, que sus profesores no lo saben todo y que en el mundo hay seres humanos que matan o roban frecuentemente, el niño crece para convertirse en un adulto débil".

Hoy el entorno, que es el espacio natural donde se mueve el niño, está sufriendo por las crecientes urbanizaciones y la "hormigonización" del paisaje urbano, con todas sus limitaciones, obliga al niño aprender a moverse "en contra de la naturaleza" (por ejemplo cruzar la calle por el paso de los peatones o andar en la acera cogida por la mano de un adulto). A medida que se va perdiendo el espacio natural, los niños han de inventar o nosotros como profesores, adultos o padres debemos ofrecerlos otras formas de movimiento. Por ello la importancia del deporte escolar y asociativo.

Algo parecido ocurre también en el mundo del fútbol. En vez de practicar en un jardín o en la calle o cualquier otro espacio natural, el creciente trafico y urbanismo no permite a la gran mayoría de los jóvenes disfrutar de la infancia que vivían sus abuelos. Desde la edad benjamín están hoy en día (afortunadamente sólo en pocas Federaciones Territoriales) todavía expuestas a unos rígidos métodos de entrenamiento y a ligas con competiciones que no respetan las leyes de la naturaleza ni las capacidades mentales y físicas de sus jóvenes practicantes.

Las competiciones en vez de adaptarse con sus reglas perfectamente al benjamín, alevín, infantil y cadete, le obligan a adaptarse a ellas. La prisa de acercar los jóvenes promesas al juego de los adultos han resultado con frecuencia en la adquisición de numerosos hábitos incorrectos que limitan hoy y limitarán ambién en futuro el rendimiento de muchos jugadores adultos.

Poco se gana, pero mucho se pierde, cuando se organizan ligas de benjamines en el fútbol 7 o cuando se obliga a los infantiles de enfrentarse durante el inicio de su pubertad ( cuando atraviesan una profunda crisis mental y física) a la dificultad y complejidad de la competición adulta en un campo demasiado grande y un balón, para ellos, demasiado pesante.

Ni los benjamines, ni los infantiles están todavía listos o preparados a enfrentarse con ciertas garantías de éxito a 7 contra 7 o 11 contra 11, ni del punto de vista de la fisiología o biomecánica ni del punto de vista cognoscitivo.

Tenemos que saber que una competición determina en alto grado los objetivos, los contenidos y los métodos del proceso de entrenamiento-aprendizaje. Eso vale también para los niños. Cuando una competición no respeta el momentáneo nivel de habilidades y capacidades del niño (como ocurre por ejemplo con el 7 contra 7 para los benjamines o el 11 contra 11 para los infantiles). ¿cómo se puede esperar que los formadores realicen sus entrenamientos "a la medida del benjamín o infantil", teniendo en cuanta sus característicos intereses , expectativas ,habilidades y capacidades?

La experiencia ha enseñado que los formadores sólo estarán bien considerados por los padres y oficiales del club cuando cosechan éxitos con sus alumnos. Pero para poder lograrlos deben orientarse constantemente a la competición de los niños y preparar sus entrenamientos con contenidos lo más similares a la competición, porque eso facilita al alumno la transferencia del entrenamiento a la competición y viceversa.

Aparte de eso, si un sistema de competiciones exija del benjamín y alevín cada sábado la práctica exclusiva del fútbol, los entrenadores-formadores, en búsqueda del éxito rápido, eligen para sus entrenamientos sobre todo contenidos futbolísticos, descuidando la parcela de la motricidad y de la imprescindible coordinación.

Más temprano se organiza para los niños competiciones que exigen sólo habilidades y capacidades futbolísticas, más temprano los formadores tienden a ofrecer en su proceso de enseñanza-aprendizaje exclusivamente contenidos específicos, es decir del juego de fútbol.

Pero quién sólo sabe de fútbol, dice Cesar Menotti, ni del fútbol sabe…

Así los técnicos de los jóvenes potencian una prematura especialización del niño, sin asegurar que los niños reciban en los primeros años de su práctica futbolística una amplia formación polifacética con una gran diversidad de estímulos y experiencias motoras, lo que los científicos del deporte consideran imprescindible para lograr éxitos en la edad adulta.

En vez de ponerse ala par de la naturaleza y despertar y desarrollar de forma natural la innata capacidad creativa y de imaginación mediante competiciones formativas a su medida (por ejemplo un "Pentatlón para el Mini Fútbol" -unos 3 juegos de fútbol combinados con 2 juegos polivalentes para los benjamines, Fútbol 7 para los alevines y Fútbol 8 entre las dos áreas de penalti en el campo reglamentario para los infantiles) se obliga a los niños de estas edades a obedecer en sus actuales competiciones a las rígidas reglas de comportamiento del mundo de los adultos. ¡Sólo su aceptación y aplicación por parte del niño hace posible un desarrollo ordenado de esta competición ! El excesivo número de jugadores en el campo del fútbol 7 o 11 crea frecuentemente situaciones confusas o no solubles (existe una defensa presión natural porque todos los niños quieren jugar el balón a la vez) a las cuales la mayoría de los jugadores suelen responder con un gran porcentaje de errores y además con un juego destructivo.

Modificando en algo la palabras de Postman podemos afirmar "al permitirles el acceso a la fruta prohibida de la información (competición) adulta, se expulsa los niños del fútbol del jardín de la infancia".

Parece que hoy en día muchos responsables del fútbol base piensan todavía como la gente en la Edad Media. ¿Por qué ? En la Edad Media la sociedad sólo conocía bebés y adultos. A los seis o siete años se consideraba una persona de esta edad como un adulto porque participaba en todos las actividades adultas: trabajaba con los adultos, comía, se vestía y se comportaba como uno de ellos.

¿Por cuánto tiempo todavía se permite que las pocas experiencias de unos pocos continúan obstaculizando la óptima formación de las próximas generaciones de futbolistas?

"Uno de los varios problemas a solucionar en nuestro fútbol base es que la gran mayoría de los formadores conocen bien su programa o modelo de formación para los niños, pero no conocen bien a ellos"

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 7 - N° 34 - Abril de 2001

Formação do jovem praticante, Jose M. constantino

Formação do jovem praticante

Quem ensina o desporto às crianças e aos jovens? A pergunta pode parecer descabida. Mas nada se perde em ensaiarmos as respostas. O ensino do desporto, através das diferentes modalidades desportivas é realizado pelas escolas e pelos clubes. E por outras entidades públicas e privadas. O ensino da natação ou do futebol, por exemplo, pode ser encontrado em programas escolares e em serviços de clubes, municípios e entidades empresariais privadas. Mas se quisermos procurar o ensino da esgrima dificilmente o encontraremos fora da estrutura associativa. Ou o hipismo na estrutura associativa e privada. Com excepção, em ambas, do ensino publico militar. Os exemplos podem multiplicar-se e revelarão um elevado grau de diferenciação no modo como as modalidades desportivas encaram o problema da respectiva aprendizagem técnica.
Num quadro tão díspare quem assegura a qualidade dessa formação? A resposta tem sido encontrada através da certificação dos agentes de ensino (professores, treinadores, etc.) Supostamente, essa certificação, garante a respectiva qualidade. É o caso da licenciatura em educação física e desporto e dos diferentes graus de qualificação de treinadores desportivos.
Qual o balanço que é feito desta qualificação? Garantem as diferentes formações em educação física e desporto (existem cerca de meia-centena) as necessárias competências para o efeito? As alterações produzidas no âmbito da formação de treinadores serão suficientes para garantir a respectiva qualidade formativa?
Estes temas não parecem estar na primeira linha das preocupações de quem gere as modalidades desportivas. Mesmo sabendo-se que, em parte, a qualidade dos agentes de ensino determinará em muito a qualidade dos praticantes. Durante décadas esta foi uma frente de batalha de técnicos desportivos oriundos da formação superior em desporto e com forte ligação às modalidades. Mas uma batalha que para ser vencida carecia de um adequado envolvimento dos dirigentes. Que deveriam olhar para a formação dos técnicos como um elemento critico para qualificação das respectivas modalidades e não apenas como um negócio em que se transformaram muitos dos cursos “formação “.
Nesta matéria não se pode invocar apenas as responsabilidades do Estado. Elas existem, é certo. Patentes no laxismo irresponsável que permitiu o aparecimento de formações superiores em educação física e desporto sem a garantia de adequada qualificação científica (e muito para além da empregabilidade necessária…). No atraso de um novo regime de formação de treinadores que os actuais responsáveis políticos de algum modo resolveram. Mas também é justo que se reconheça que se há sector da administração pública desportiva que tem um histórico de elevada credibilidade e competência é o da formação. Sobreviveu sempre às alterações governativas e de liderança interna e manteve, ao longo dos anos, um acervo de competência que é da mais elementar justiça reconhecer e louvar.
Só que o desenvolvimento das práticas do desporto e a entrada no sistema de novos actores (públicos e privados) alterou significativamente o modelo existente e colocou questões novas que carecem de ser objecto de abordagem. E que incluem não apenas a formação dos agentes de ensino/treino. Mas o próprio modelo técnico da formação do jovem praticante, todo ele construído num mundo que é hoje diferente. Um modelo que se não pode limitar às aquisições motoras de tipo técnico ou táctico mas que se tem de centrar no lugar que o desporto deve assumir na vida de um jovem e no tempo que ele está disponível para lhe dedicar. O abandono desportivo precoce, matéria pouco estudada entre nós, tem no modo como é feita a formação do praticante um dos seus elementos explicativos. Não o único. Mas um elemento a pesar.
Qualquer que seja o modelo dessa formação desportiva as práticas recreativas são o terreno essencial quer à progressão técnica, quer à fixação dos jovens nas modalidades. E um pressuposto à orientação e especialização desportivas. Uma matéria, de resto, abundamente documentada por quem neste país tem estudado e publicado sobre a formação dos jovens praticantes. E uma responsabilidade,não nos cansamos de repetir ,de quem dirige as modalidades: as respectivas federações.




publicado no blog: colectividades desportivas

Saudação

Caros amigos e desportistas
Vamos iniciar uam nova época desportiva e com ela mais desenvolvimentos, comentarios, artigos de opinião sobre a abordagem do Andebol de Base, conto convosco e basta enviarem-me artigos identificados para serem publicitados neste blog de todos.
abraço
antonio cunha